Opinión: «Todos y todas tenemos que aprender cómo utilizar los dispositivos con internet»

Nora Intxaurbe Morales (alumna de 4º de ESO)

Ecribo como representante del alumnado de 4º de eso para daros mi opinión sobre los dispositivos con acceso a internet.

Hoy Internet se ha convertido en una de las formas más importantes de comunicación. Cada vez son más los y las jóvenes que empiezan a utilizar estos dispositivos, aunque esto suponga una gran responsabilidad para las familias porque el uso puede crear, también, problemas. Para tener una visión completa de este tema hay que tener en cuenta que las familias, en su día a día, también dutilizan estos dispositivos.

Pasemos, pues, a desarrollar el tema por partes.

Por un lado, los beneficios. El uso de Internet tiene una serie de beneficios y ventajas. Los más importantes, la comunicación, la acumulación de información y las aplicaciones. Nos parece necesario comunicarnos con amigas y familiares tanto lejanos como cercanos. Por otro lado, es imprescindible para buscar información, fotografías, noticias, etc. de todos los temas, es decir, para desarrollar el aprendizaje. Además, nos sirve para disfrutar de aplicaciones muy útiles. Por ejemplo, para buscar los horarios del autobús, para ver mapas…

En todo caso, también tiene sus aspectos negativos. Por ejemplo, podemos pasar demasiado tiempo ante cualquier dispositivo sin darnos cuenta, y eso, en un futuro, genera problemas como la falta de atención. Por si fuera poco, los virus pueden introducirse en los dispositivos, usurparnos la identidad, amenazarnos con información subida a las redes sociales (incluyendo fotos)…

Por lo tanto, internet a día de hoy, me parece necesario para los y las jóvenes, siempre y cuando se le dé un uso controlado.

Por otro lado, es de destacar el uso que los y las jóvenes hacemos de las redes sociales en general, sobre todo, a través de los móviles. Las más conocidas son WhatsApp, Instagram, Twitter, Facebook, TikTok, SnapChat… donde el mayor riesgo es que la información que compartimos deja una huella digital para siempre, o que otro usuario puede difundir nuestra información.

¿Y qué hay del uso de los adultos?

Pues bien, ni los padres ni las madres, aunque muchas veces critiquen a los y las jóvenes, se dan cuenta de que hacen lo mismo. Es decir, a veces nos dicen lo que no tenemos que hacer, mientras ellos/as lo están haciendo. Pero este caso dependerá de cada familia.

Para terminar, la situación de la pandemia está focalizando el problema de los móviles en los y las jóvenes. De hecho, durante la cuarentena, el móvil era imprescindible para comunicarse y trabajar. Por ello, tanto el uso del móvil como de internet ha aumentado considerablemente y las ventajas que aporta han influido enormemente en la juventud. Asimismo, a la hora de trabajar, el alumnado en general, hemos avanzado mucho. No obstante, esta forma de comunicar y trabajar ha venido para quedarse y ha creado una dependencia enorme en los y las jóvenes.

Por lo tanto, resumiendo todo lo anterior, se pueden extraer las siguientes conclusiones: los y las jóvenes necesitamos dispositivos para utilizar internet. Los utilizamos para comunicarnos, para trabajar, para buscar información… Sin embargo, hay que aprender a dar un buen uso a estas herramientas, tanto en lo que se refiere al uso, como al tiempo que pasamos con ellas, tanto jóvenes como adultos.