Gotzone Duñabeitia Kintana (Directora Pedagógica de Kurutziaga Ikastola»
… ondo etorri eraikitzen gabizen etxera
gure leihotik geroa ikusten da …
(canción del Ibilaldia de 2005eko)
Palabras escritas hace tiempo y que todavía hoy, sin duda, nos definen. El euskera y la cultura vasca; el carácter cooperativo y la solidaridad; la nuestra es una comunidad educativa que toma decisiones básicas de forma democrática. Una comunidad que, a través de la educación, quiere ser un agente activo en la sociedad. «Bizitzeko hezi!” (Educar para vivir), es nuestro lema.
Con estas palabras o similares dimos inicio a la jornada de puertas abiertas del pasado sábado. Unas jornadas para dar a conocer a las nuevas familias nuestro proyecto y sus fundamentos. Este año ha sido una experiencia especial, totalmente condicionada por la pandemia. Sin embargo, dimos prioridad a la cercanía y lo hicimos en grupos pequeños y fue una mañana preciosa, que, en cierto modo, se repite todos los años y que cada año es diferente.
« Y tratamos de explicar quiénes somos y de dónde venimos. Cuál es nuestra finalidad educativa y nuestra forma de trabajar»
Esas preguntas y esa curiosidad en los rostros de las madres y los padres. Unas familias se encuentran a las puertas de tomar una decisión importante de cara al futuro inmediato. Acercarse a la ikastola para algunos es entrar en la zona completamente nueva. Otros/as, en cambio, vienen motivados/as por su propia experiencia, o por las referencias de amigos/as. Quieren conocer la ikastola: aulas, patios, actividades educativas… Y sobre todo, saber qué tipo de profesionales acompañarán a sus hijos e hijas en su recorrido educativo. Las familias buscan un contexto lo más rico y sensible posible, dando prioridad a un proyecto que conecte con sus valores: un modelo educativo de calidad en euskera.
Y tratamos de explicar quiénes somos y de dónde venimos. Cuál es nuestra finalidad educativa y nuestra forma de trabajar. Que tenemos una comunidad co puesta de firentes etapas pero con un mismo fin. Que la base está en la reflexión que los y las profesionales hacemos de la práctica diaria, en la innovación y la formación continua. Ese es nuestro valor añadido. Presentamos todo esto abriendo las puertas de nuestra casa de par en par con humildad, con total respeto a la decisión que vayan a tomar las familias.
En estas jornadas suele ser bonito ese momento en el que una misma se aleja un poco de sus tareas cotidianas y se da cuenta del camino recorrido hasta llegar al punto en el que estamos. Esa constatación del presente que nos da pie a pensar en el futuro. Y es que la ikastola es un organismo vivo que crece con su gente y que tiene un objetivo muy definido: educar para la vida, educar para vivir.
Bizitzeko hezi.
