El euskera y la comunidad vascoparlante se encuentran en una situación de emergencia lingüística. Son varias las razones que se aducen para esta afirmación: el retroceso en el uso del euskera, la falta de apoyo a las leyes, la vulnerabilidad que la globalización ha aumentado en las lenguas minorizadas… si no tomamos medidas a corto plazo para dar la vuelta a estas tendencias vigentes, vendrá la recesión.
No es fácil proclamar que la situación personal es grave, pero es imprescindible ser consciente de la realidad para poder tomar las decisiones necesarias para revertir una situación que no queremos.
El alumnado, familias y trabajadores y trabajadoras que formamos parte de la comunidad de la ikastola Kurutziaga también vivimos con preocupación la situación de nuestra lengua. Por eso estamos aquí para expresar nuestra responsabilidad y también para reafirmar nuestro compromiso a favor del euskera.
A pesar de la difícil situación, estamos con muchas ganas de afrontar el reto que tenemos por delante, porque nosotros queremos vivir en euskera. Todos tenemos la oportunidad de hacer nuestra aportación: aprendiendo y practicando euskera en el día a día, dando el paso a los euskaltegis o animando a los que nos rodean, ofreciendo el euskera a los nuevos vascos, acercándonos al universo de la cultura vasca…
También queremos salir en euskera fuera de las puertas de nuestra ikastola, que es el punto de respiro del euskera, queremos ir en euskera a todos los rincones de nuestro pueblo. Queremos vivir en euskera y así lo decimos, tan simple como rotundo, euskaraz eta kitto!
