Todos los jueves
Más de veinte alumnas y alumnos de 3º y 4º de ESO se reúnen todos los jueves y conforman el Euskara Taldea. Hace más de quince años que este grupo existe en la ikastola y se va renovando con las siguientes generaciones. Participan de forma voluntaria y comparten la preocupación por el uso del euskara. El profesor Mikel Eguren es el encargado de dinamizar el grupo.
Maddi, Unai y Ander son alumnos de 4º de ESO y tienen la sensación de que en la ikastola “cada vez se da antes el paso al castellano”. No conformes con la realidad que intuyen, desde Euskara Taldea pretender incidir en ella. Colocan carteles para sensibilizar al alumnado en el uso del euskara y organizan dos días llenos de actividades para los alumnos de ESO. El primero suele ser el día del Euskara (3 de diciembre) y segundo a finales del curso escolar.
Este año escolar el Euskara Taldea ha comenzado con un curso de formación de cuatro horas. Los hemos encontrado en la sala de Tecno en la segunda sesión de formación.
Zergatik ez? ¿Por qué no?
Maite Unzalu Ormaetxea es dinamizadora en la asociación duranguesa Berbaro. Ofrece estos cursos de formación vía la Mancomunidad en varios centros escolares del Duranguesado. Es un proyecto de Topagunea basado en los talleres TELP catalanes (Taller d´Espai Lingüístic Personal). Según apunta Maite, el objetivo principal es “que tomen conciencia de por qué NO usan el euskara”.
Del papel a la acción
En la sesión de formación anterior Maite les dio varios de datos sobre el uso del euskara en el Duranguesado. “La verdad es que nos chocó bastante. No pensábamos que los datos fueran tan bajos”, reconocen Maddi, Unai y Ander. En la sesión de formación del martes Maite repartió post-its entre los miembros del grupo y les invitó a que identificaran cuándo, con quién y por qué se expresaban en euskara o dejaban de hacerlo. Hablaron sobre cuál era su opción lingüística en las redes sociales, en actividades extraescolares, en la cuadrilla, servicios públicos y el motivo por el que les parecía que esa opción se daba.
Para terminar, se repartieron en grupos con el objetivo de idear un scketch express sobre cuándo y con quién se daba ese reemplazo lingüístico. Las situaciones recreadas crearon momentos muy divertidos.
La sesión formativa comenzó a la una y finalizó a las dos menos diez.